miércoles, 9 de febrero de 2011

La emoción de una cuesta.

 El domingo miniña descubrió lo divertido que puede llegar a ser una cuesta. Lo hizo con una moto de esas que se tiene que impulsar con los pies, la tiene desde su cumple pero el otro dia es cuando mejor se lo ha pasado jugando con ella. Y descubrió que en las cuestas cuando está arriba si se deja caer con la moto puede llegar a coger mucha velocidad y cuanta más pendiente más corria.

 Yo me daba miedo e intentaba frenarla pero ella decia que la dejara sola, y claro no podia ser así que me tocaba correr en algunos trozos. En fin que ella tiene menos miedo que yo a la velocidad. Y bueno muy a pesar mio veo que ya mismo no me necesita para según que cosas

 Entonces el lunes yo tenia que ir al banco y como últimamente el tema carro es discusión constante pues probé a llevarla con la moto y bueno no está mal la idea pero solo si tengo una cosa que hacer y si uno no tiene prisa, porque ella todavia no es de fiar sobretodo si estamos hablando de calles donde hay bastante tráfico.


1 comentario:

  1. Jajaja, lo que se divierten con motos, triciclos y demás trastadas, los mios aún no han probado, pero seguro que les encantará. Hay que ver lo poco conscientes que son los niños de los peligros, además como tu niña sea muy atrevida, no la vas a poder dejar ni un minuto sin vigilancia. Hay que ver, como los niños van evolucionando en gustos y preferencias hacia sus juguetes, a medida que se hacen mayores, prefieren juguetes de más movimiento!

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