jueves, 26 de abril de 2012

 Mis niños nunca han pintado una pared, no hacen ruido, solo cogen un juego nunca dos a la vez, comen sentaditos muy tranquilos, un rotulador hasta los cinco años no se lo he dejado, hasta siempre me obedecen.

 Pero lo que yo veo son dos niños que cuando les dicen un "no" cuando piden algo, no paran de repetir la cosa hasta que normalmente lo consiguen,  los he visto jugar en la cama de los padres y cuando van de visita arramblan con todo lo que pueden olvidando eso de sacar una sola cosa en casa.

 En fin en mi opinión prefiero que mi niña me haga las trastadas a mi que aunque muchas veces me cabreo pero otras realmente me rio para mi de ver la imaginación que tiene, quiero ir incrementando normas para poder conseguir algo de orden pero poquito a poquito. 

 Pero estoy orgullosa: 

 -de que cuando voy de visita ella respeta las normas de esa casa seguramente no perfectamente pero más o menos.

 -de que sabe jugar mezclando juguetes, no tiene que ser siempre con las mismas normas, ya tendremos tiempo de encerrarnos en juegos de muchas normas.

 - y  sabe pintar sobre un papel en blanco, no pasa nada si no hay un dibujo casi siempre es más divertido inventarse un dibujo aunque  luego yo tenga preguntar  lo que es.

 

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